The Starcaise y el concepto de justicia

Estos días me he estado viendo, sin prisa, The Starcaise (HBO, 2022). Una miniserie basada en un posible crimen cometido en Carolina del Norte y protagonizada por actorazos de la talla de Colin Firth o Toni Collete.

A lo largo de ocho capítulos se narra la historia de la familia Peterson, con miembros de hasta cuatro familias que se vinculan con las distintas historias de amor que vivió el novelista Michael Peterson entre EEUU y Alemania hasta casarse con Kathleen, en 1996.

Paso de hacer destripes de ningún tipo, si bien es importante entender que es una serie dramática basada en el documental de Jean-Xavier de Lestrade (Soupçons, 2004), por lo que puedes recoger mucha información del caso a través de otras fuentes, o en la Wikipedia mismo.

Un puzle de ocho horas

No obstante, te recomiendo que no lo hagas: por dos razones. La primera es que vale la pena dedicar ocho horas y armar tu propio puzle. Los hechos presentados, a veces, se han tildado de inexactos, pero, a diferencia del juicio, aquí no importa demasiado. La segunda, en cambio, es algo más personal, y es que creo que ya eres mayorcito (o mayorcita) para seguir esperando que te sirvan la verdad tal cual. Esta lección, The Starcaise, la exprime a fondo, revisando todos los recovecos del sistema judicial americano y, en realidad, del propio concepto de justicia.

¿De qué trata The Starcaise?

La cosa va así: la madrugada del sábado 9 de diciembre de 2001, Peterson llama al servicio de emergencias porque su esposa está gravemente herida. Cuando llegan los paramédicos y la policía, la mujer ha fallecido y la escena presenta signos de un posible asesinato y aquí… empieza una historia en la que se conjuga la presunción de inocencia, las apariencias y los secretos e intereses enfrentados de una familia fragmentada. Si te pica la curiosidad, y te gusta el género, dale una oportunidad.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *